Aprovechando que estos días me ha dado por echar partidas al Crazy Taxi, me veo con la obligación moral de abrir una entrada sobre este juego. Y hoy os voy a hablar de uno de mis modos favoritos: el Crazy Box. Era exclusivo para las versiones de consola (frente a la recreativa). Y nos proponía superar una serie de pequeños retos/pruebas/minijuegos, de muy diversa índole, a bordo del taxi.
Cada misión nos exigía alcanzar una marca mínima (ya fuera de tiempo, ejecución de movimientos, recogida de objetos...). Así hasta completar todos los retos. La verdad es que esto nos venía bien para descongestionarse de tanto viajecito por la ciudad, tanto cliente y tanto tráfico. El modo Crazy Box es el complemento perfecto que permite dar variedad a un juego que por lo general es bastante lineal.
Hoy vamos a recordar algunas de las misiones más emblemáticas del Crazy Box
En Crazy Jump debemos lanzar el taxi por una pendiente inclinada, cuesta abajo y sin frenos, como si se tratara de una prueba de salto de esquí. Hay que coger velocidad por la rampa. Llegar hasta el final de la misma, y dar el salto. Para obtener el visto bueno debemos avanzar 150 yardas en este salto.
En Crazy Flag teníamos 20 segundos para girar hacia atrás el taxi y recoger una bandera que había clavada en la arena de la playa. Si nos parecía difícil dar marcha atrás siempre podíamos dar un rodeo por el mar. Ya sabéis que los taxis en este juego son como submarinos y se pueden conducir por debajo del agua.
Crazy Ballons fue uno de mis favoritos. Teníamos 45 segundos para explotar 20 globos que estaban desperdigados por una explanada de hierba. El vehículo debía ir lo suficientemente rápido para que las ruedas pincharan los globos. Sí conducíamos muy lento, el globo no reventaba. Solo se movía ligeramente hacia la misma dirección del coche, sin inmutarse.
En Crazy Bowling debíamos recorrer los muelles del embarcadero y derribar todos los bolos que había a lo largo de la pasarela. Estos formaban 7 grupos de 10 bolos cada uno. Teníamos que derribar los 70 bolos sin dejarnos ninguno en 30 segundos.
En Crazy Drift había que realizar 15 combos de derrape (hacia detrás o hacia delante) en medio minuto. El evento tenía lugar en una plazoleta de hierba y asfalto rodeada de varias edificaciones
En Crazy Turn nos tocaba llevar a un cliente a su destino. El camino estaba plagado de curvas de 180 grados que iban haciendo ondulaciones. Teníamos 35 segundos para hacerlo
Crazy Bound era parecido al anterior. Debíamos conducir el taxi por unas pasarelas de piedra, rodeadas de agua. El camino era estrecho. No debíamos salirnos de él, ya que si no, caeríamos al agua. Para saltar de una pasarela otra debíamos impulsarnos en unas rampas inclinadas hacia un lateral. Teníamos 40 segundos. La ruta, a medida que avanzábamos, se hacía cada vez más endiablada
En Crazy Zig Zag el concepto se repetía, pero esta vez en un camino con curvas de 90 grados hacia derecha e izquierda. La pasarela de piedra era muy estrecha y estábamos rodeados de agua. Un paso en falso y caeremos al vacío. Teníamos 25 segundos. En el último tramo había una curva de 180 grados. En el decorado podíamos ver muchos barcos de vela amarrados en el puerto. Había una variante de esta prueba de mayor dificultad (Crazy Zig Zag 2)
En Crazy Rush teníamos 1 minuto y 10 segundos para llevar a cinco clientes a sus destinos. Todos ellos se encontraban en el centro de un cruce de caminos y a cada cliente debíamos conducirlo a un lado diferente de la glorieta, por lo que estaríamos obligados a dominar técnicas como el derrape o la marcha atrás. Una odisea
En Crazy Jam debíamos llevar a tres clientes a sus destinos por unas calles atestadas hasta los topes de tráfico, y con un montón de cruces en los que no paran de cruzar otros coches y camiones en sentido contrario al nuestro. Tenemos 45 segundos.
En Crazy Pole el concepto se repetía, pero por un camino campestre lleno de curvas de 90 grados con palos de la luz en medio de la ruta que mermaban nuestra velocidad y nos hacían parar el vehículo en caso de impacto. Teníamos 1 minuto y 10 segundos para completarlo. La última parte del trayecto constaba de curvas de 180 grados. El camino terminaba en una iglesia en la que había una pareja de novios
El reto de Crazy Trought consistía en avanzar por una carretera y pasar cerca de 30 vehículos, pero sin chocarse con ellos. La distancia debía ser la precisa. Si nos poníamos demasiado lejos no contaba el combo. Si nos poníamos muy cerca nos acabábamos chocando y tampoco valía. Había que aproximarse pero sin tocarse. Teníamos 1 minuto y medio. La carretera transcurría entre el mar y la montaña
En Crazy Parking teníamos 25 segundos para llegar a lo más alto de un parking de varios pisos. Empezábamos abajo del todo y teníamos que ascender por las diferentes plantas, hasta llegar a la azotea. Había que esquivar los coches aparcados, pero también los que salían y los que entraban, a veces por espacios muy estrechos.
En Crazy Party debíamos recoger a 7 clientes que estaban dispersos en una área bastante amplia (una zona de montaña, con varias edificaciones a su alrededor, unos aparcamientos, cabinas telefónicas, cajas...). A veces debíamos usar las rampas para acceder a las azoteas de los edificios donde estaban algunos clientes. Todos ellos eran miembros de un equipo de fútbol americano. Una vez estuvieran los siete a bordo del taxi debíamos llevarlos a su destino: el final de la montaña. El camino era muy estrecho y podíamos caernos por los precipicios
En Crazy Attack teníamos 4 minutos para dar una vuelta completa a toda la ciudad del modo arcade. Esto significa que debemos empezar y acabar en el mismo punto, pasando por los diferentes distritos.
Ya os dije una vez que la urbe en la que tiene lugar este juego posee una estructura circular, y al final, si vamos en una misma dirección acabaremos volviendo al punto de partida.
Tendremos que atravesar los lugares más emblemáticos: las calles empinadas del tranvía, el puerto, el parque, la iglesia, el aeropuerto, el estadio, la autovía, el centro, la zona comercial, la zona universitaria y la periferia. Entonces, habremos dado una vuelta completa
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