Corría el año 2005. En aquel momento, cursaba Segundo de Bachillerato, modalidad de Humanidades y Ciencias Sociales (letras al poder jejejjeee). Estaba a un paso de cumplir la mayoría de edad y de hacer la prueba de Selectividad, para entrar en la Universidad e iniciar mis estudios de Filología Hispánica.
Recuerdo con especial nostalgia un día en clase de Inglés. La profesora (y tutora del grupo) organizó el típico concurso por equipos en el que poner a prueba nuestros conocimientos sobre el idioma y cultura de Shakespeare: los ganadores tendrán 0,25 puntos más en esta evaluación, sentenció la docente
Era la típica actividad que se hacía los viernes a última hora para amenizar el ambiente y hacer la espera más corta a que empezara el finde. A las dos de la tarde, ni los alumnos teníamos ganas de conocer las reglas de uso del presente simple, ni la profesora de explicar la sintaxis de la oración subordinada. Por eso, es esa última sesión de la semana, la tutora se curraba concursos y juegos muy chulos.
En uno de esos días de competición, a mí me tocó un grupo flojillo. Perdíamos por 8 puntazos. Se hacía dificilísimo remontar eso. La subida de nota la acariciaba el otro equipo. Faltaban tres minutos para que sonara el timbre. El último turno y nos vamos-dijo la profe. Todos estaban ya guardando las cosas en las mochilas y poniéndose los abrigos, con ganas de salir del aula.
Yo fui el encargado de cerrar ese día el concurso. El pescado estaba ya vendido. Y encima, me tocó la categoría de "cultura inglesa", una de las que peor se me daban, ya que en la asignatura de inglés se ve mucha gramática y vocabulario, pero muy poco de la vida cotidiana de Inglaterra. Esas preguntas, al final, dependían un poco de tu formación extraacadémica.
La pregunta no podía ser más clara: di nombres de monumentos o lugares emblemáticos de la ciudad de Londres. Un punto por cada respuesta.
En ese instante, mis ojos se iluminaron. Mi mente solo podía pensar en un único juego: The Getaway, aquel título de Team Soho del año 2002 para la Play 2, que estaba protagonizado por el mafioso Mark Hammond y el policía Frank Carter, y que se ambientaba en la capital inglesa. Solo tenía que recordar los lugares por los que habían pasado los héroes (el Big Ben, Hyde Park, King Cross, Trafalgar Square, el palacio de Buckingham...)
Al fin y al cabo, la recreación del centro de Londres era milimétrica, con unos gráficos fotorrealistas y detallados que te metían de lleno en la urbe. SUBLIME.
Gracias a The Getaway, pude inflarme en el último turno. No recuerdo el número exacto de respuestas que di, pero fueron las suficientes para dar la vuelta al marcador. La peña se quedó asombrada, sobre todo los que ya se veían ganadores. ¿Y cómo sabe tanto de Londres el tipo este que nunca ha salido ni dos palmos de su casa?
La profesora se pensó que yo había estado de viaje alguna vez en la ciudad del Támesis: has estado este verano en Londres. ¿A que sí? (me dijo).
Pues no!!!!!!!!!! Si sabía tanto de Londres era por la cantidad de paseos, correrías, hazañas, misiones y horas pasadas con el simulador de mafiosos de Sony. Jugué tanto (fue mi primer título de la PS2) que conocía la ciudad de memoria. Me ponía el modo libre y empezaba a dar vueltas de un lado a otro por el simple placer de contemplar la vida cotidiana de la urbe.
Además, junto al manual de instrucciones del juego, te daban un plano de la ciudad con el nombre de las calles y la ubicación de los monumentos y atracciones turísticas más emblemáticas. Un material que dominaba al dedillo jejejje.
Por eso, en la entrada de hoy, daremos un paseo por la ciudad de Londres, recordando los lugares más conocidos que aparecían en la aventura de Team Soho. ¿Queréis saber por donde se movían Mark Hammond y Frank Carter? Vamos allá!!!!!!!!!!!!!!
-King Cross, la estación de ferrocarril más aclamada de Inglaterra. De aquí partía el expreso a Hogwarts en los libros de Harry Potter (en el andén Nueve y Tres cuartos jejejej).
-Hyde Park, el pulmón de Londres. Los amantes de las zonas verdes podrán relajarse y dar paseos por sus caminos de arena.
-London Eye (o Millennium Wheel), la noria más alta de Europa
-El Palacio de Buckingham, la residencia oficial de la corona británica (o lo que es lo mismo, la reina Isabel)
-Picadilly Circus, una de las intersecciones de calles más famosas de la urbe. Sus carteles publicitarios son su seña de identidad
-Trafalgar Square, la plaza que conmemora la batalla del mismo nombre (1805). Es famosa por albergar la columna de Nelson, la National Gallery o la Canada House.
-Parliament Square, con el Big Ben al fondo. Además, encontramos la Abadía de Westminster, la Iglesia de Santa Catalina, el Middlesex Guildhall, la Casa Portcullis o la escultura de bronce de Churchill
-Leicester Square, famosa por albergar las estatuas de William Shakespeare, Charles Chaplin o Newton, además de un pequeño parque. Constituye el centro del cine de Londres
-Canarby Street, la calle peatonal más comercial de la capital. Hay un montón de boutiques y tiendas de ropa.
-Soho, el barrio de los sex shop. Es la zona de ocio por excelencia
-Oxford Street, otra calle emblemática. En la radio de la policía se escuchaba con frecuencia, que Mark Hammond escapaba por Oxford Street. Por eso nunca se me olvida como lugar emblemático.
-Chinatown, una zona de restaurantes chinos, panaderías, supermercados y calles peatonales. En cierta misiónnos pedirán llevar un cadáver hasta esta calle.
-BFI IMAX CINEMA, un edificio de estética futurista, hecho de vidrio, y sede de los famosos cines del British Film Institute. Recuerdo pasar al lado en la primera misión mientras perseguía a los asesinos de la esposa de Mark Hammond.
-El Támesis, el río que atraviesa Londres.
Encontramos varios puentes en la ciudad. El más conocido es Tower Bridge. De ahí la famosa canción infantil London Brigde is falling down, que ha sonado en numerosos videojuegos como Rabbit Transit de Atari 2600
Aquí un fotograma de Westminster Bridge. A la izquierda, el palacio de Westminster. A la derecha, el Saint Thomas Hospital, el hospital universitario de Londres.
El Waterloo Bridge constituye la arteria principal del Southbank Center, el centro neurálgico de las actividades culturales y artísticas de la urbe.
-Marble Arch, el arco de triunfo más conocido de Londres. Fue diseñado por John Nash en 1825
Este arquitecto también construyó una iglesia anglicana evangélica de estilo Regency, de planta circular y colmada por una enorme aguja. Se trata de All Souls Church
-Langham Hotel, una elegantísima edificación del siglo XIX, diseñada por John Giles. Se sitúa frente a Portland Place, en pleno corazón financiero. El hotel está rodeado de edificios de oficinas
-Lacaster Hotel, otro lugar de hospedaje conocido. Aquí se alojó una compañera mía de Universidad
-Los típicos autobuses rojos londinenses de dos pisos:
Los míticos taxis ingleses, fabricados por la compañía LDI
Los buzones y cabinas telefónicas de color rojo, característicos del país inglés. En mi Comunión me regalaron una caja de bombones que tenía forma de cabina londinense jejjee
Y para finalizar, os dejo un video de la secuela: The Getaway Black Monday (2004). En él se realiza un tour turístico por los lugares más emblemáticos de la urbe londinense.
La tercera función gamer de la temporada viene cargada de temazos. 6 melodías procedentes de juegos clásicos nos esperan esta tarde. Algunas, en versión original. Otras, modernizadas, tuneadas y puestas al día, gracias al talento e inspiración de personas que dan rienda suelta a su creatividad, y comparten de manera altruista sus obras con la comunidad.
El show está a punto de empezar!!!!!!!!!!!!!!! Espero que disfrutéis del repertorio. Ojalá la nostalgia y la emoción invada vuestros corazones. Es la única pretensión de esta sección del blog.
El primer número del día es un clásico del cine y los videojuegos. Está protagonizado por un conocido explorador, arqueólogo y aventurero, que nació de la mente de George Lucas en los años 70. Se trata de Indiana Jones. La imagen del héroe perseguido por una roca gigante se ha convertido en un icono del séptimo arte.
¿Qué podemos decir de su banda sonora? John Williams fue el creador de su tema más emblemático: Raider's March.
Ha sonado en la pantalla de título de casi todos sus juegos: En busca del arca perdida (1982), El reino perdido (1982), Indiana Jones in Revenge of the Ancients (1983), El templo maldito (1985), La última cruzada (1989), El destino de la Atlántida (1992), Indiana Jones Greatest Adventures (1989), Aventuras de despacho (1996), La máquina infernal (1999), La tumba del emperador (2003), Lego Indiana Jones The Original Adventures (2008), Lego Indiana Jones 2: The adventures continues (2009) y El cetro de los reyes (2009)
La excepción la encontramos en dos títulos, en los que la mítica melodía no aparece: The young Indiana Jones Chronicles (1992) e Instruments of chaos: Starring young Indiana Jones (1995).
Yo he jugado a La última cruzada (aventura gráfica), La tumba del emperador (muy influido por Tomb Raider), Greatest Adventures (una antología de los tres primeros films) y el Templo maldito (un arcade de acción y saltos)
Vamos a escuchar una versión realizada el 17 de octubre de 2013 en el Auditorio Nacional de la Música de Madrid, a cargo de una orquesta sinfónica, dirigida por Constantino Martínez-Orts.
La segunda actuación de la tarde corre a cargo de Dragon Quest VIII El periplo del Rey Maldito. Llegó a España en el año 2006, para Play Station 2. El título fue producido por Square (los creadores de Final Fantasy) y Level 5 (los responsables de Dark Chronicles). Había oído hablar de la saga, pero nunca me había animado a probarla.
Recuerdo que la Hobby Consolas le otorgó una calificación altísima (93). Entonces, me animé, y dije: si los desarrolladores no son nuevos en esto (al menos, han creado otras obras maestras para mi consola), los gráficos en cell shanding tienen pintaza y las críticas están siendo excelentes: ¿Qué puede fallar? La mejor manera de poner un broche de oro al género del RPG en la Play 2.
La banda sonora es una delicia para los oídos. Al final, me he decantado por un tema que irradia mucha calma, tranquilidad y serenidad. La utilizaba como música de fondo para relajarme y estudiar. También me sirvió para conciliar el sueño. La podemos escuchar en algunos pueblos y aldeas del juego. Se titula Quiet Village
La canción fue compuesta por Koichi Sugimaya, el responsable de la música de Dragon Quest. Posee cierto parecido a un tema de Disney titulado It's a small world after all.
Aquí os dejo una versión a piano de la pieza, ejecutada por un aficionado llamado James Cowper, que ha colgado su trabajo en Youtube
La tercera audición del día nos lleva a una de las joyas de Atari Games (Midway). Se trata de Gauntlet, un juego de laberintos que salió para máquinas recreativas en el año 1985. Nuestro objetivo es hallar la salida de las diferentes mazmorras, mientras nos enfrentamos a un sinfín de monstruos de fantasía como dragones, fantasmas, parcas o demonios.
Los protagonistas son un bárbaro, una valkiria, un enano y un mago. La vida está representada con un marcador de tiempo que desciende a medida que avanza la aventura. Comienza en 2000 y acaba en 0. Cada vez que un enemigo nos ataque, nos restarán segundos extra del contador. Si recogemos los trozos de comida que hay dispersos por el escenario, sumaremos tiempo (alrededor de un minuto y medio por ración).
Me envicié cosa mala al Gauntlet II de la NES con mi primo. Mi récord fue la mazmorra 112. No se me olvida jejjejee. Llegado a cierto punto, los laberintos se repiten una y otra vez.
Os traigo una versión a guitarra acústica del tema principal de Gauntlet. Suena muy flamenco!!!!!!!!!
La siguiente pieza la escuchamos por primera vez en 2001, cuando Capcom lanzó el primer Devil May Cry para Play Station 2, una aventura de acción con tintes góticos.
El protagonista, Dante, debe explorar exhaustivamente los escenarios (básicamente, la fortaleza y sus alrededores como el coliseo, el barco hundido o el cañón de la niebla) y derrotar a los enemigos (parcas, reptiles, arañas, calaveras, marionetas diabólicas...) para obtener orbes rojos (sangre de demonio)
Estos servirán de moneda para comprar nuevas habilidades, artículos, armas o mejoras de lucha en las estatuas de la divinidad, que hay dispersas por los niveles.
Cuando hayáis recogido un numero considerable de joyas, canjeadlas por jugosas recompensas para las espadas Ifrit y Alastor (Meteor, Inferno, Vortex, Air raid...). Además, podréis adquirir ayudas médicas que serán fundamentales para afrontar los combates contra los jefes finales
Me encanta la música que se escucha al entrar en una estatua del tiempo. Interactuar con el menú para intercambiar gemas por poderes, al son de unos acordes tenebrosos a la par que relajantes, genera una mezcla extraña de sensaciones. Por un lado, estás tranquilo, ya que en ese lugar te sientes seguro. No hay enemigos. Nadie te va a atacar. Puedes descansar. Por otro lado, las voces femeninas dan mal rollo
Recuerdo que una vez le enseñé a mi abuela canción, y me dijo que bajara el volumen de la televisión, ya que los vecinos iban a pensar que no estábamos bien de la cabeza por escuchar semejantes sonidos. Eso es de no estar muy cuerdos, me decía ella jejjejee. Grande mi yaya!!!!!!!!!!!!!!
En la segunda parte de la historia, Dante regresa al castillo. Sin embargo, este ha sufrido cambios con respecto al inicio del juego. Ahora, se ofrece una versión siniestra y maldita de los mismos lugares de la primera mitad de la aventura.
No sé por qué extraña razón, los desarrolladores prescindieron de la música de las estatuas divinas en este segundo tramo. Cada vez que interactuemos con una escultura del tiempo, no sonará la melodía. Se escuchará el sonido ambiente. Reconozco que eché de menos la canción. Me quedé huérfano. Ya no era lo mismo pararse delante del monumento y bucear por los menús en busca de mejoras sin esas voces de mujer. Una lástima.
Vamos a disfrutar de la versión original, tal cual aparecía en el videojuego:
La banda sonora de Project Gotham Racing 2, que llegó a Xbox en noviembre de 2003, incluye temas de géneros variados: rap, metal, rock, indie, pop, R&B, electrónica, ska, rap, dance...
Entre las canciones españolas, hay una que recuerdo especialmente. Es interpretada por el grupo The Gurus, y se titula Tormenta. Pertenece al Mini LP All the children sing, y al álbum Oscuridad. Es una delicia recorrer los circuitos de Barcelona, Chicago, Florencia, Moscú o Edimburgo a ritmo de rock.
Para el concierto de esta tarde, me he quedado con una versión realizada el 22 de junio de 2009 en el Electric Bar, un emblemático bar del barrio de Gracia, en el que se ofrecían actuaciones musicales en directo
Gracias al título de Bizarre Creations disfruté del talento de Josep Pons (batería), Sergio Bartel (bajo y voz), Emilio Ramírez (guitarra y voz) y David Abadía (música).
Cerramos la función con un par de melodías provenientes de Commando, un mítico juego de Capcom, producido en el año 1985 para Amstrad y las máquinas arcade.
El protagonista es un soldado llamado Joe, que aterriza en medio de la selva desde un helicóptero. ¿Su objetivo? Salir vivo del asedio del ejército enemigo, empleando únicamente un subfusil y granadas de mano. El camino está lleno de peligros: trincheras, emboscadas, vehículos de guerra, portones que se abren y no paran de salir combatientes...
El ritmo de la partida es tremendo: balas por todos los lados, soldados que salen debajo de las piedras, muchos sprites de manera simultánea (con alguna ralentizacion por ahí suelta)
Aunque los efectos sonoros son casi inexistentes, esto se compensa con una banda sonora pegadiza y marchosa, que casa perfectamente con el ambiente bélico.
Escucharemos una versión limpia y nítida (sin ruidos del juego) del tema de la pantalla de presentación y de la melodía estándar que suena durante las escaramuzas por el bosque. Qué recuerdos!!!!!!!!!!!!!!
