Bienvenidos a la segunda entrega del reportaje especial que estamos haciendo estos días sobre los circuitos del Mario Kart 64. Hoy recordaremos las cuatro pistas que componen el Flower Cup, el segundo campeonato del juego. ¿Queréis saber cuáles son? Pues no os lo perdáis.
La quinta fase de Mario Kart posee una ambientación urbana, ya que se desarrolla en una concurrida autopista, al anochecer, con un bello crepúsculo violeta-anaranjado.
El trazado tiene forma de ocho y transcurre sobre asfalto señalizado con rayas discontinuas, como en una carretera convencional.
La autovía está plagada de tráfico, ya sea autobuses, camiones o coches particulares que avanzan muy despacio debido a su afluencia. No teníamos más remedio que hacer peligrosos adelantamientos sin chocarnos con ellos para poder avanzar. Entre la estrechez del camino, la densidad de vehículos (muchas veces el hueco entre uno y otro era muy pequeño) y los rivales avasallando, este circuito se convertía en uno de los más espectaculares del juego (sobre todo en el modo espejo cuando el tráfico venía de cara)
Las paredes de piedra, las farolas iluminadas, los quitamiedos y vallas y la hierba completaban los márgenes de la ruta.
Las cajas de objetos se encontraban siempre en salientes, situados a los bordes de la carretera
En la zona central del circuito teníamos que pasar por debajo de un puente con un dibujo de Toad, el cual aparecía también en algunos de los carteles promocionales del camino, sobre fondo dorado
FRAPPE SNOWLAND
El primer circuito de ambiente gélido de Mario Kart 64 conformará una preciosa postal navideña. La carretera transcurre sobre un terreno congelado, con paisajes nevados en los decorados. Veremos caer copos a lo largo de todo el recorrido.
Habrá árboles blancos y esculturas gigantes de hielo de algunos personajes de Nintendo como Yoshi o Mario. Mucho cuidado con los muñecos de nieve ya que esconden bombas en su interior que harán saltar el kart por los aires. En ocasiones, tendremos que pasar por zonas atestadas de muñecos como si fueran un campo de minas. Nos veremos obligados a elegir si ir por el lado derecho (más rodeo) o por el izquierdo (camino más corto, pero con muchos muñecos bomba).
Podemos destacar algunos lugares especiales como el desnivel que hay después de atravesar las primeras curvas, el cañón helado o un puente de madera al acabar la vuelta, que pasará por encima de un río helado.
Si en Super Mario World pudimos deleitarnos con una divertidísima isla de chocolate, ahora en Mario Kart 64, podremos saborear esta suculenta y dulce montaña de la misma tentación. De ahí el predominio de tonos marrones, en diferentes gamas, ya sean claras u oscuras, que contrastan muy bien con una atmósfera como de neblina.
Se trata de un circuito bastante suntuoso, con una carretera estrecha, llena de baches, saltos, curvas cerradas y cuestas de diferentes inclinaciones.
Veremos algunas laderas de piedra así como carteles de Yoshi y señales de tráfico que nos indican las pendientes del trazado.
Atravesaremos un túnel excavado en el interior de la montaña. Y en el último tramo tendremos que esquivar rocas gigantes de chocolate que caen de la cima. Mucho cuidado de que no nos aplasten, ya que perderemos un tiempo precioso.
En algunos tramos la carretera no tendrá quitamiedos, y si no tenemos cuidado podremos caer por los precipicios. Entonces tendrá que venir Lakitu a recogernos en su caña de pescar, y perderemos muchas posiciones.
MARIO RACEWAY
El último circuito del segundo campeonato está dedicado al fontanero más famoso de la historia de los videojuegos.
Se trata de un trazado de asfalto, similar al de Luigi Raceway, pero mucho más técnico, con más curvas y menos rectas.
El entorno es precioso. En los márgenes de la ruta veremos amplios y diáfanos campos con hierba verde y flores amarillas, que dan ganas de tumbarse a tomar el sol. El paisaje estará delimitado por unas tapias de piedra y/o unas paredes con cuadros rojos y amarillos. También veremos árboles y plantas piraña que nos harán perder el control del Kart.
En las líneas de meta y salida están las gradas, en las cuales veremos una gorra roja tamaño gigante de Mario.
A lo largo del camino, nos encontraremos varios carteles gigantes giratorios con un dibujo de Mario saludando. Aunque os puedan parecer enormes, son destructibles. Podemos destrozarlos utilizando una estrella de invencibilidad.
Algunos elementos míticos son la seta gigante, las colinas que rodean las primeras curvas o el túnel en forma de tubería verde. En algunos tramos en lugar de encontrar hierba circundando la carretera veremos arena que nos hará reducir (y mucho) la velocidad, tal como sucedía en la pista de Mario Circuit de Super Mario Kart de Super Nintendo.
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