domingo, 12 de diciembre de 2021

Juegos de NES a ritmo de música clásica


Me encanta escribir entradas en las que puedo mezclar mis dos pasiones favoritas: los videojuegos retro y la música. Cada cierto tiempo tengo que abrir un post sobre melodías gamers. No lo puedo evitar. Forma parte de mi naturaleza. Como decía Don Quijote, donde hay música no puede haber cosa mala. 

Hoy vamos a recordar varias piezas de música clásica que sonaron en juegos de NES. Por aquella época tenía 6 años. Era un renacuajo que no sabía quién era Mozart, Beethoven o Bach. Tatareaba la melodía con alegría, sin ser consciente de que se trataba de un tema culto, con siglos de historia, compuesto por genios del ritmo y la sensibilidad.


Menos mal que mi padre estaba ahí recordándome el valor y la trascendencia que esos soniquetes tenían en nuestra cultura: eso que estás escuchando lo hizo un señor llamado Johann Strauss hace 120 años. Y yo me quedaba con la boca abierta de la sabiduría de mi progenitor y me sentía orgulloso de conocer algo así. 

A partir de ahí, cada vez que jugaba a ser trapecista en Circus Charlie aprendí que ese vals que sonaba en la última fase se llamaba El Danubio Azul. 



En la fase del león (nivel 1), por el contrario, escuchamos la marcha militar American Patrol, compuesta por Frank White Meacham en 1885. Ya dedicamos una entrada a esta canción a comienzos de año. 



Nada más empezar una partida del Mario Bros original (Pipeline), y antes de que aparezca en pantalla el fontanero y los primeros enemigos, se pueden oír los acordes de la Pequeña Serenata Nocturna de Mozart (1787)



Cuando cursaba 5º de Primaria, en la asignatura de música, la profe nos enseñó a tocar esta pieza con la flauta. No sabéis la alegría que me dio recrear una melodía que conocía de muchos años gracias a Mario Bros. 


El compositor romántico alemán Richard Wagner fue el creador de la Cabalgata de las Valkirias (1851). Constituye el comienzo del tercer acto de la ópera La valkiria, dentro del ciclo El anillo del Nibelungo.

Este tema se puede escuchar en dos clásicos de la NES:

-Field Combat (1985), un título de disparos en el que los jugadores toman el control de la Génesis, una nave en forma de platillo volante



El juego venía incorporado en el típico cartucho pirata de "100 in 1". 


-Punch Out, el mítico juego de boxeo. La cabalgata de las valkirias era la canción oficial de Von Kaiser, el personaje de nacionalidad alemana.



Por cierto, en este juego había otros dos personajes asociados a temas clásicos:

-Don Flamenco, el boxeador español. Su melodía era la obertura de la ópera Carmen, de Bizet (1875)



-Glass Joe, el luchador francés. Su canción es La Marsellesa de Rouget De Lisle. Es el himno oficial de Francia:



La Marcha Militar Número Uno de Franz Schubert (1826) apareció en el videojuego Challenger. Fue producido por Hudson en 1985. 



El título nos pone en la piel de un arqueólogo (parecido a Indiana Jones) que debe rescatar a la princesa María de las manos de Don Waldorado. En el nivel 1, donde se produce el rapto, se escucha de fondo la famosa pieza militar


Johann Sebastián Bach fue el autor de Tocata y Fuga en Re Menor. La compuso entre 1712-1717 (según los estudiosos) aunque no fue publicada hasta 1867. 

Es una de las piezas de órgano más famosas de la historia de la música. La tomó prestada Konami para su matamarcianos Gyruss, que salió a la venta en 1983 para las máquinas arcade y en 1988 para la NES.



El juego sigue la tradición de otros shooters como Galaga o Space Invaders. El tema lo escuchamos en el prólogo. 


Hay otro título de la NES en el que también aparece Tocata y Fuga. Se trata de Batlle of Olympus, un action RPG producido por Imagineer (1988). 



La aventura está influida por la mitología griega. Manejamos a Orfeo, que debe ganarse el favor de los dioses para encontrar a su amada Helena. Durante las conversaciones con las divinidades sonará como tema de fondo la obra maestra de Bach. 


El concierto para piano y orquesta número uno de Tchaikovsky (1875) conforma la banda sonora del genial City Connection, aquel título de Jaleco en el que a bordo de un coche debemos pintar las calles de las grandes urbes del mundo, mientras esquivamos vehículos policiales y gatos. Ya le dedicamos una entrada hace dos años. 



Se trata de una versión muy modernizada, con variaciones. A veces da la sensación de que es una pieza nueva


El videojuego Binary Land de Hudson (1984) inserta dos piezas emblemáticas:

-Por un lado, el conocido vals Je te voix de Erik Satie (1902). Se escucha de fondo durante la partida, mientras movemos a los pingüinos simétricamente por el laberinto y lanzamos telas de araña



-Por otro lado, la Oda a la alegría de Beethoven (1785). Suenan unos acordes tras el reencuentro de los protagonistas en la jaula con un corazón dentro, justo en el centro del laberinto



Y por último, no nos podemos olvidar del Vals de los patinadores de Émile Waldteufel (1882), el tema central de Antartic Adventure de Konami. Recorrer esas rutas de hielo, a velocidad de crucero, saltando hoyos con focas al son de la música no tiene precio. 




No hay comentarios:

Publicar un comentario