domingo, 6 de noviembre de 2022

Peligros en Pitfall Harry: una aventura en la jungla

La entrada de hoy está dedicada a Pitfall Harry, el mítico aventurero que protagonizó allá por 1982 uno de los primeros títulos de plataformas. Su creador, David Crane (fundador de Activision), se inspiró en el personaje de Indiana Jones, que por aquel entonces se había puesto de moda con su primera película: En busca del arca perdida.

Como todo buen explorador, Pitfall se adentrará en lo más profundo de la jungla con el fin de encontrar una serie de tesoros ocultos. El planteamiento fue todo un éxito: número uno en ventas durante un año y segundo juego más vendido de la Atari 2600. Y por supuesto, ejerció una influencia muy importante en héroes posteriores como Lara Croft, Ace Ventura o Nathan Drake 

El escenario está lleno de enemigos y peligros a los que se tendrá que enfrentar el bueno de Pitfall. Las selvas son entornos salvajes y vírgenes, y en cada una de los 250 pantallas siempre habrá obstáculos y/o trampas que se interpondrán en nuestro camino. En el post de esta tarde vamos a recordarlos todos. 

En total, debemos recoger 32 tesoros perdidos en la jungla (bolsas de dinero, diamantes, joyas, lingotes, barras de plata, reliquias...). Tenemos un límite de tiempo (20 minutos) y salud (3 vidas). Y la aventura no es nada fácil, pues tendremos que solventar una variedad imponente de trabas y trances. 

El protagonista deberá saltar troncos de árboles. A diferencia de otros obstáculos, no supone la pérdida directa de vidas, pero sí la reducción de puntos del marcador. En algunas pantallas los leños se muestran estáticos, postrados en puntos fijos del escenario. No se mueven. Cuando pasemos a su lado, tendremos que brincar para esquivarlos. Sin embargo, hay zonas en las que los tallos ruedan por la pantalla. Entran por el lado derecho y salen por el izquierdo, para volver a aparecer por el derecho. Igualmente, nuestra misión es saltarlos para que no nos golpeen. 

Una escalera nos permitirá bajar a los túneles subterráneos, y movernos por debajo del nivel del suelo. Las paredes de ladrillos nos impedirán avanzar por las galerías, y nos veremos obligados a retroceder y volver a la superficie. 

A veces, flanqueando la escalera encontraremos hoyos/agujeros muy traicioneros. Si no los saltamos, el héroe caerá al subterráneo. Aunque no muera, será penalizado con 100 puntos menos del marcador. Una forma rápida (y dolorosa) de bajar a los túneles jejjee

Los lagos de alquitrán son un clásico de Pitfall Harry. No os dejéis engullir por ese color negro intenso. Si caéis en él, perderéis una vida en cero coma. 

Para cruzar el estanque, el protagonista deberá agarrarse a una cuerda. Así alcanzará la otra orilla. Esta hazaña irá acompañada de una melodía muy característica. 


Por cierto, en las galerías subterráneas aparece un escorpión, uno de los enemigos más temidos por los jugadores 


A veces, en lugar de cruzar una laguna de gasolina, debemos sortear un estanque de agua. El proceso es el mismo: agarrarse a la cuerda, balancearse y alcanzar la otra orilla. Lo único que cambia es el color de la superficie. En vez de negro, azul


Otra estampa mítica de Pitfall Harry es cruzar un río utilizando como plataformas a los cocodrilos que campan por el agua. Cuando los caimanes tengan la boca abierta, no se os ocurra saltar. Sed pacientes y esperad unos segundos a que cierren la mandíbula. Cuando la hayan replegado, podéis saltar sobre los animales como si fueran rocas para cruzar a la otra orilla del lago. 


En ocasiones, el héroe podrá agarrarse a una cuerda. Como si fuera Tarzán cruzará el humedal sin tener que subirse a los caimanes. 


Aparte del escorpión y el cocodrilo, hay otra criatura la mar de "simpática". Se trata de la serpiente. Es de color negro. Como podéis imaginar, su mordedura es metal. No os acerquéis mucho a ella y saltadla, no vaya a ser que perdáis una vida tontamente. 

Su color negro, su disposición enrollada sobre sí misma y su lengua resultan imponentes. Normalmente aparecen después de un obstáculo chungo. En este caso, al lado de un estanque de gasolina. Si os tiráis con mucha fuerza desde la cuerda, os comeréis al bicho. Mucho cuidado!!!!!!!!!!!!

A veces, no dispondremos de cuerdas a las que agarrarse para cruzar un lago de alquitrán. En este caso, la charca posee el extraño poder de aparecer y desaparecer. Durante tres/cuatro segundos el estanque se esfumará de la jungla por arte de magia. El suelo se secará y el camino quedará libre para que el prota pueda cruzar. Eso sí, no os demoréis mucho, ya que pasado ese tiempo, el humedal volverá a hacer acto de presencia y si nos pilla en medio, seremos engullidos por el gasóleo y perderemos una vida. 

En estas fotos que os traigo, aparte de observar el comportamiento de la laguna, podéis ver que el héroe tiene a su alcance un tesoro en forma de lingote. 


A veces, a pesar de desaparecer la lagunilla, Pitfall podrá agarrarse a una cuerda y balancearse hasta la cruzar a la otra orilla de este estanque invisible. 

Los lagos de agua, al igual que los de fuel, también pueden desaparecer momentáneamente. Lo que no encontramos son cuerdas para cruzar. 

El último peligro al que se enfrenta Pitfall son las hogueras de fuego. Tan solo hay que saltarlas para no quemarse. Fácil y sencillo

Como veis, la jungla es un lugar expuesto. Hasta que no le cojáis el truco a la dinámica de cada trampa no conseguiréis avanzar sin perder vidas. Una vez os acostumbréis, avanzaréis sin complicaciones. En su momento, entre mi padre y yo nos lo llegamos a pasar. Tenía solo seis años. Recuerdo con detalle lo que ocurrió. Ese día mi madre estaba enfadada con nosotros, ya que teníamos ocupada la televisión con la consola, y ella quería ver el programa de Tele Cinco "La batalla de las estrellas" (allá por 1993). No paraba de protestar: acabad ya, que quiero ver el concurso jejjee.

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